El 1 de enero de 2011, Venezuela. Sí, no es un error, ¡fue el UNO de ENERO! Anoche ni llegamos a medianoche para celebrar la Nochevieja con los venezolanos, porque pasamos toda la noche anterior a la Nochevieja en un autobús muy ruidoso por la música, en el que cruzamos casi la mitad de este enorme país. Finalmente, llegamos al extremo sudeste de Venezuela, cerca de las fronteras con Brasil y Guyana. Es la llamada Gran Sabana, uno de los lugares más misteriosos del mundo, muy poco poblado y rodeado por los tepuyes con paredes verticales y cimas relativamente planas.
Dormimos en una pequeña cabaña, que en lugar de cristales sólo tenía mosquiteros en sus ventanas, y en la víspera del Año Nuevo partimos con nuestro guía venezolano para ver de cerca esta región extraordinaria. El Monte Roraima, el tepui más alto del mundo, incluso desde lejos luce majestuosamente y atrae como un imán, pero probablemente nunca podremos pararnos en su cima plana. Ese día visitamos innumerables cascadas, barrancos, cañones y miradores para finalmente llegar allí. En un lugar que parecía como si fuera sacado de las películas sobre dinosaurios. Frente a nosotros había un paisaje que podía ser usado perfectamente para el rodaje de Jurassic Park. Nos quedamos fascinados y nos preguntamos qué pasará si desde detrás de una de las palmas aparece la cabeza de un brontosaurio.
ubicación | La Gran Sabana, Venezuela |
trípode / a mano | a mano |
ISO | 100 |
apertura | f8 |
tiempo de exposición | 1/100 s |
+48 515 171 666